lunes, 1 de febrero de 2010

Dirigido por ... FRANK TASHLIN.







Frank Tashlin nace en New Jersey en 1913. Muy aficionado al cine desde pequeño y con un talento natural para el dibujo, a los 15 años consigue un puesto como "chico para todo" del dibujante Max Fleischer, y poco después como dibujante él mismo para series como Merrie Melodies (1933-35) y Looney Tunes (1942-45). Continúa su trayectoria como escritor de gags para Laurel y Hardy y los Hermanos Marx, entre otros, como director de continuidad en Walt Disney, productor ejecutivo de los dibujos Screen Pems, y desde 1944, como guionista en películas de ficción.
A partir de 1951 comienza a dirigir , al no quedar satisfecho de lo que otros hacían con sus guiones, y lo hace con The Lemon Drop Kird como correalizador aunque no acreditado. Su carrera como realizador no es demasiado larga, su última película, la floja Cerveza para todos, vehículo para el nefasto Bob Hope, esta fechada en 1968. Muere el 5 de mayo de 1972 con sólo 59 años.




En 1952 dirige las comedias The first time y El hijo del rostro pálido, secuela de El rostro pálido, ámbas con Bob Hope. Sus mejores películas son las que van de la 1ª mitad de los 50 a la 1ª mitad de los 60, años en los que Tashlin inyecta frescura a la comedia de Hollywood aplicando toda su experiencia de dibujante: audaces emplazamientos de cámara, ritmo desenfrenado, intenso colorido, gran utilización del gag, tendencia a la sátira.


Junto al gran cómico Jerry Lewis, Frank Tashlin filma algunos de sus mejores títulos. Cuando todavía forma pareja con Dean Martin les dirige en Artistas y modelos (1955) y Loco por Anita (1956), y ya con Jerry en solitario en Yo soy el padre y la madre (1958), Tú, Kimi y yo (1958), El Ceniciento (1960), ¿Qué me importa el dinero? (1962), Lío en los grandes almacenes (1963) y Caso clínico en la clínica (1964).

Con la rubia explosiva Jayne Mansfield rueda dos películas: The Girl can't help it (1956) con la presencia de leyendas del rock como Fats Domino, Little Richard y Gene Vincent, y Una mujer de cuidado (1957). Con la insulsa Doris Day filma un par de películas al final de su carrera, Una sirena sospechosa (1966) y Capricho (1967)

Aunque parte de su carrera está unida al genial Jerry Lewis, concretamente 8 películas juntos, a Frank Tashlin se le reconocen sus grandes aportaciones en la innovación de la comedia hollywoodiense. Su manera de transformar la realidad en alocado cartoon, sus magníficos gags extraídos directamente de los dibujos animados, acumulados escena tras escena, incluso superpuestos en una misma escena, liberados en fin, de estar siempre al servicio de la narración. En muchas de sus películas satiriza y denuncia, a su manera, el poder de los mass media, sobre todo la TV, pero también la publicida, las películas (¡incluyendo las suyas!). Su insistencia en satirizar la vulgaridad y la estupidez le hace ser acreedor de la etiqueta de "mal gusto" que comparte en esa época con Billy Wilder, cosa que le excluye de los altares de la crítica de su tiempo.

No obstante, cómo no, en Francia es apreciado y admirado desde el primer momento por los jóvenes de la Nouvelle Vague que aplauden sus innovaciones formales y le consideran un revolucionario. Uno de sus mayores admiradores es Jean-Luc Godard cuyas películas Une femme est une femme (1961), Vladimir et Rosa (1971) y Tout va bien (1972) comparten con Tashlin su gusto por la fragmentación, la exageración y el juego con los métodos narrativos.


2 comentarios:

David dijo...

Tengo olvidadas sus pelis. Tendría que revisar su filmografía. Pero tengo El oso que no lo era y lo leí a mis críos muchas veces cuando eran más pequeños.

Anónimo dijo...

Lo mejor de la película YO SOY EL PADRE Y LA MADRE: La vieja obsesionada con comprar todo lo que anuncia la publicidad televisiva. Un consejo, vean "El milagro de Morgan´s Creek", se divertirán mucho más.