lunes, 29 de diciembre de 2008

La serena belleza de Jennifer Connelly.
















En 1984 Sergio Leone estrenaba la utima de sus películas, Erase una vez en América. En una de sus primeras escenas una adolescente baila en un almacén. Un chico, escondido, la espía. Ella lo sabe. Ella es Jennifer Connelly e iniciaba aquí una larga e irregular trayectoria cinematográfica. Fue icono adolescente a finales de los 80. Su belleza virginal causó furor en Labios ardientes a principio de los 90, una década en la que rodó toda una serie de films irrelevantes. El nuevo siglo la ve renacer con mejores papeles en mejores películas, gana un Oscar con la mediocre Una mente maravillosa, y pasea su espléndida madurez por Hulk, Casa de arena y niebla, Diamante de sangre o Juegos secretos.




Hay algo de inocencia primigenia en su perfecto rostro ovalado, en su serena mirada nostálgica, un equilibrio mágico que los años han sabido mejorar, como las mejores mujeres. Hay Jennifer Connelly para mucho tiempo.

1 comentario:

Bargalloneta dijo...

Estic d'acord amb tu en què Connelly està madurant molt bé!!
a mi m'agrada molt aquesta actriu però no ha tingut les oportunitats que es mereix per donar-se a conèixer al gran públic.... i és una llàstima perquè la considero molt bona actriu a part de ser molt bonica i està madurant d'allò més bé!